Bañares es uno de esos pueblos casi desconocidos de La Rioja Alta que se están quedando despoblados poco a poco. De tradición rural, su población ha ido decreciendo paulatinamente hasta los poquitos más de 300 del reciente censo y la mayoría de más de 60 anos. Culturalmente, su proximidad a centros con mas esplendor histórico como San Millán de la Cogolla, Santo Domingo de la Calzada, Haro, Nájera o Cañas, más que favorecerle, da la impresión de haberle mantenido al margen injustamente, pues es una localidad llena de historia propia y con rinconcitos preciosos.
Y no deja de parecerme extraño porque posee raigambre, solera y ha supuesto un enclave codiciado a lo largo de siglos de historia.
Los primeros datos escritos sobre Bañares son del siglo XI y durante cientos de anos ha sido escenario de numerosas batallas entre los reinos de Castilla y Navarra dada su posición estratégica en la frontera entre ambos. Fue Condado desde cerca del 1500 y Señorío hasta 1811,
Como buen enclave estratégico estuvo dominado por un castillo, del que, solo quedan las ruinas. Por ellas sabemos que era de planta rectangular, con muros que alcanzaban los 3,5 m de espesor, de sillería y con Torre del Homenaje adosada al paño sur. Se cree que la piedra fue vendida para construcción.
Lo que si queda son dos iglesias prácticamente pegadas. La mas antigua, románica de finales del siglo XII, principios del XIII, Fue la Ermita de Santa Cruz hasta que en el siglo XV se empieza a construir la actual en el mismo emplazamiento, la portada románica se traslada a una ermita a unos metros y pasa a llamarse llamarse Ermita de Santa Maria la Antigua. Esta catalogada como Monumento de Interés Cultural.
La actual Iglesia Parroquial de Santa Cruz, construida alrededor del ano 1500 de estilo gótico tardío, Es una iglesia enorme, de nave única con dos portadas monumentales con altos pórticos y rematadas con pináculos.
En su interior se hay depositado otro Monumento de Interés Cultural, el Arca de San Formerio, una de las obras representativas del románico, de madera con chapas de cobre esmaltadas y decoradas con motivos geométricos, heráldicos y figurativos, entre los que se encuentran las figuras de un rey y de un obispo.
San Formerio es el Patrón de Bañares, históricamente sus fiestas de celebraban en septiembre, después de la recolección, ahora se han adelantado al tercer fin de semana de agosto con actos religiosos, conciertos, encierros y comilona el ultimo día.
Tradicionalmente los jóvenes del pueblo se ganaban el honor de pertenecer a la cuadrilla que danzaba en procesión con el Santo, en lo últimos anos han admitido a mujeres como danzantes por falta de jóvenes.
Marga G.-Chas Ocaña
